Triángulo de Amor Bizarro ensordecen Valencia

Este jueves 4 de noviembre los coruñenses Triángulo de Amor Bizarro, una de las propuestas más interesantes del panorama indie nacional, visitaron la sala Wah Wah de Valencia. Nos presentaron su oscuro trabajo donde predominan las paredes de sonido, con guitarras enfurecidas al más puro estilo shoegaze, y es que la influencia de My Bloody Valentine o Sonic Youth aparece constantemente a lo largo de sus dos discos Triangulo de Amor Bizarro (2007) y Año Santo (2010).

En una sala llena de público bastante joven el cuarteto comenzó sonando muy fuerte, desde la primera canción dejaron claro que venían con ganas de destrozar unos cuantos tímpanos. Comenzaron con el continuo bajo distorsionado de Isabel Cea y la canción Mal como efecto de voluntad. A esta le siguió ¿Quiénes son los curanderos?, enigmático tema con una letra muy atrevida ("Portaos bien, hijos de puta, que Jesus os mira desde las alturas"). Conforme avanzaba la noche parecía que el concierto iba subiendo de volumen, casi sin pausa entre canción y canción tocaron los temas más ruidosos e hipnóticos de su segundo disco, Amigos del genero humano, El baile de los caídos y La malicia de las especies protegidas, entre otras.

Con la envolvente voz de Isa, los sintetizadores y la Fender Jaguar de Rodrigo Camaaño cargada de reverberación, canciones como El fantasma de la transición o El culto al cargo, o como hacer llegar el objeto maravilloso creaban un extraño ambiente donde se podia respirar sensibilidad, dulzura y caos al mismo tiempo. Era como imaginarse a niños indefensos jugando sin darse cuenta de que estan en medio de una gran guerra sangrienta.

La controversia es uno de los grandes rasgos de este TAB, su noise-punk desenfadado hizo vibrar a casi toda la sala, el público incluso se caía al escenario con canciones como De la monarquía a la criptocracia o El crimen: cómo ocurre cómo remediarlo. En cambio con las melosas Año santo y Super castlevania IV nos demostraron que saben escribir canciones de amor enfermizo y obsesivo ("No me importa que no me quiera, yo la quiero por los dos"). En definitiva, es lo que es este grupo, un cúmulo de ruidos obsesivos, hipnóticos y enfadados mezclados con ritmos suaves que se acercan al dream-pop.

Terminaron con la anárquica Isa contra el partido humanista ("Lo malo del gobierno es que gobiernan") y un frenético Rodrigo que casi se cae del escenario haciendo noise, feedback y rasgueos, creando tanto ruido que parecia que los amplificadores iban a explotar, predominó el famoso Big Muff ruso (un pequeño guiño al sonido de los 90), junto a mucho delay y trémolo.

Así nos abandonaron, con la guitarra apoyada en el amplificador creando un bucle de sonido. Terminó el concierto, pero el grupo mostró su cercanía quedándose en la sala entre el público con el que se relacionaba, mantenía conversaciones y bromeaba.

Esperemos que nos vuelvan a visitar pronto, ya que se podría decir que es uno de los mejores grupos actuales en la escena española. Sin buscarlo se están convirtiendo en una referencia, con una propuesta totalmente diferente a cualquier grupo nacional. Estarán de gira hasta el 18 de diciembre, y desde aquí recomiendo una asistencia casi obligatoria si visitan tu ciudad.

Mr Guest