SALA WAH WAH 4/11/2011
Ramón Rodríguez y los suyos presentaron su nuevo disco con un muy cuidado directo donde la guitarra acústica tuvo menos protagonismo.
Los también barceloneses Me and the Bees fueron los primeros en subir al escenario. Trajeron un Pop muy sencillo y que no estaba demasiado cuidado, poca calidad musical, salvada por la buena voz de Esther Margarit, la más carismática de las chicas.
Pese a dichas carencias, hicieron un show entretenido que divertía a la gente que iba entrando a una sala Wah Wah cada vez más llena.
Lo bello y lo bestia, la canción con la que abren su nuevo disco Libre Asociación, fue el tema elegido por The New Raemon para empezar su concierto. Se había creado muchas expectativas sobre el directo del nuevo disco y desde el primer tema empezaron a transmitir una atmósfera mucho más potente que en su gira anterior.
Trataron de alternar temas nuevos y temas viejos para contentar al público que aplaudía mucho más las de los primeros discos. Sin embargo, aunque gusten más las primera canciones de Ramón, el sonido estaba mucho más trabajado en las últimas, se notaba que la banda estaba diseñada para el nuevo directo, la violinista solo hacía acto en estas. De hecho, alguna de las canciones viejas como Sucedáneos no sonaba tan bien adaptada al formato eléctrico.
Por lo demás el concierto transcurrió de manera muy similar al que se vio en año pasado en el mismo lugar, con una característica pausa donde Ramón se queda sólo con la acústica y deleita al público con sus temas más tranquilos, momento en el que toca Te debo un baile, una de las canciones más esperadas por el público pese a que él insiste en que es una versión y se le note cierta carga al tocarla. Durante esta pausa Ramón tuvo que pedir silencio varias veces, no estuvo muy respetuoso el público. La banda completa vuelve al escenario para acabar con potencia el directo.
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