Blunderbuss / JACK WHITE

Se acabó la guitarra. Es una buena frase para resumir el primer álbum en solitario de Jack White. Y con ella el músico ha perdido parte de su fuerza, como si de Sansón y su pelo se tratara. Blunderbuss es un trabajo mucho más moderado, donde el piano sustituye a los solos prodigiosos a seis cuerdas, y que cuenta sin embargo con varios temas nada despreciables.

Desde que White publicara en 2007 su último álbum con The White Stripes, Icky Thump, el músico de Detroit no ha parado quieto: The Raconteurs, The Dead Weather, el lanzamiento de su propio sello. A principios del año pasado se tomó unos minutos para anunciar que The White Stripes se separaban definitivamente (y hace poco anunciaba que no volverían a no ser que estuviera en serios problemas económicos). ¿Qué pasaba por la cabeza de White en medio de esta vorágine de vida? Blunderbuss es la respuesta. 

Aún a costa de dejarse por el camino parte de una energía de la que pocos músicos actuales pueden presumir, White ha descargado toda su frustración, sus celos y su rabia (hacia el sexo opuesto principalmente) en los temas de este álbum. 

Se lamenta de la situación con Karen Elson en Sixten Saltines

¿Quién está celoso de quién?/Si estoy ocupado no puedo preocuparme menos de lo que hagas/pero cuando estoy solo no pienso en nada más/que en si un chico podría estar abriéndose camino y tocándote

...Critica a la nueva mujer "liberada" y egoísta del siglo XXI

A ella no le importan el color de las moraduras que me está dejando/porque es libre en el siglo XXI

...Y no puede dejarse fuera a Meg White, a quien recuerda en Hip (Eponymous) Poor Boy

Así que entro en el juego/pero siempre lo hago igual/Y estaré usando tu nombre/pero ellos me gritarán “pobre chico”

(Por si alguien no lo sabe, Jack White usa el apellido de Meg) 

El músico intocable también sufre, el casi único heredero de la tradición del rock de las últimas décadas queda al descubierto. "No puedo quedarme quieto porque sé que lo haré", deja caer en Hip (Eponymous) Poor Boy. White está cansado, y quizás es eso lo que se refleja en los temas de Blunderbuss. 

La canción que da nombre al disco es suave, acompañada por un piano y recuerda al I want to be the boy to warm your mother's heart, un enternecedor tema incluido en Elephant.  No sólo en esta, sino en la gran mayoría de temas del disco, el piano se posiciona como instrumento predilecto. Blunderbuss, Hypocritical Kiss, Weep Themselves to Sleep, Trash Tongue Talker. White deja caer algún solo de guitarra de vez en cuando, como en Freedom at 21 o Sixteen Saltines, pero ni con la misma frecuencia ni del mismo nivel al que nos tenía acostumbrados. 


Más allá de Blunderbuss, el músico no ha perdido su potente directo (¡Menos mal!), y como para plantarle a cara al problema, se ha rodeado únicamente de mujeres. Quizás alguna de ellas acabe convertida en canción.


Ms A