El escenario Maravillas, durante la actuación de Russian Red |
Cuando las daisies pensábamos
desfallecer tras tres días de camping empieza lo bueno. Llega el jueves,
se abren las puertas y comienza la música. Nosotras estamos en el grupo
de personas que no entendía mucho este día, con un inesperado liderazgo
de The Streets a la cabeza, y bandas como Chase & Status o
Pendulum. En contraste con esto, un día para las solistas: Anna Calvi,
Russian Red y la polémica Julieta Venegas. Vamos, que el día aunque sea
por curioso prometía, y nosotras no nos lo quisimos perder.
Anna Calvi. Archivo FIB |
Esta dama tan mimada por los medios británicos se hizo con el corazón de muchos fibers que decidieron aprovechar una tarde en el recinto. Llena de elegancia, salió al escenario y desde un principio nos dejó boquiabiertos con un intenso solo de guitarra eléctrica que pocos se veían venir. Sirviéndose de su guitarra, un batería, y una mujer multifunción (no daba de sí entre un organillo, percusión, xilófono...), y por supuesto, su voz, se hizo con el escenario y ofreció un espectáculo que derrochó clase y la elegancia. Todo lo que salió de allí sonó a temazo, y la energía en su voz, junto a las ganas de conciertos, hizo moverse a todos los que nos plantamos ante su escenario.
RUSSIAN RED
A muchos sorprendió la dulce Lourdes Hernández, que al menos para mí tenía fama de "sosilla". Un prejuicio que desplumó con su actuación en el escenario verde, ante un público predominantemente extranjero que aspiraban a ver las actuaciones que ella precedía. Con una voz impecable y una mirada ida (por la razón que fuera), la niña de la trenza recorrió tanto los temas melancólicos de su primer disco, con auge en Cigarettes, como la nueva apuesta que supone su nuevo álbum Fuerteventura. Fue el estilo de este último disco el que dominó la actuación, en la que la cantante incluso abandonaba el micrófono con tímidos pasos de baile o dedicaba espontáneas sonrisas. No es que nos hiciera sudar, pero si disfrutar de un estilo que dio todo lo que podía de si.
PAOLO NUTINI
El joven escocés que salto al estrellato con tan solo 17
años, ya ha crecido. Cinco años después Nutini se ha cortado su melena a lo
Justin Bieber, pero su voz entrecortada y sus melodías dulces siguen siendo las
mismas que hacen enloquecer a las mujeres. Su salto al escenario fue una lluvia
de hormonas, por encima de su voz se podía oír los gritos del público femenino,
enloquecido con la presencia del atractivo cantante. En cuanto a su actuación,
impecable, cantó todos sus grandes temas sin ningún fallo y realizó varias
versiones que mostraron que ya no es el joven inmaduro que canta canciones
ñoñas, y que es capaz de llegar más allá.
CRYSTAL FIGHTERS
Paolo Nutini. Archivo FIB |
PENDULUM
Si en 2010 fueron The Prodigy los que nos ofrecieron
semejante descarga de adrenalina, este año le tocó el turno a Pendulum. Desde el
comienzo de la actuación la pista fue un pogo continuo, nadie podía quedarse
quieto. La banda decidió que la
actuación no fuera reproducida en las pantallas del escenario Maravillas lo que
fue un gran fallo, ya que los que no nos encontrábamos en las primeras filas, tuvimos
que imaginarnos lo que estaba sucediendo en el escenario. En resumen una
actuación apoteósica en especial con el gran cierre con los temas Propane Nightmare y Watercolour.
Sebastian, de Crystal Fighters, ukelele en mano |
CRYSTAL FIGHTERS
Fueron
sin duda una de las actuaciones más esperadas del día, por lo menos
desde esta casa. No necesitaron más que los temas de su primer y único
disco, Star of Love, para hacer bailar a todo el mundo, mucho más allá de las primeras filas. Temas como I Love London o Solar System hicieron enloquecer al público en saltos y aullidos, e incluso algunos temas más suaves como Plage o At Home no frenaron el baile. Una
actuación salvaje por parte de este grupo anglo-navarro (txalaparta
incluída), que estuvo a la altura de la que fue la noche más "cañera"
del FIB.
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